«Bienvenidas a Brasil», de Patrick Mille; una futura boda peligrosa

Estreno en España el viernes 27 de julio
Con unas amigas francesas malhabladas e inclusive algo obscenas, arranca la comedia del actor francés, ahora metido a director, Patrick Mille, que en su segunda película nos presenta una entretenida historia sobre tres chicas que en París reciben la noticia de que su gran amiga de toda la vida, Katia, ha decidido casarse con un rico heredero brasileño.
Dispuestas a tomarse el tema de la boda como unas vacaciones, el trío decide viajar a Brasil, donde una de las primeras cosas que harán será participar en una multitudinaria fiesta en la que corren todo tipo de drogas mientras suena la música a todo volumen.
«Bienvenidas a Brasil» contiene varios giros de guion, y el primero de ellos llega enseguida, cuando un hecho completamente fortuito provocará una muerte accidental que sin remedio condicionará todo el desenlace de la película.
La celebración de la boda debería de ser inminente, pero la fatalidad hará que ese tema entre en fuertes dificultades provocadas por ese grave incidente.
A los papeles de las cuatro protagonistas de este filme rodado en su mayor parte en el país carioca, se le suma un joven de vida licenciosa que aspira a ser un semental (muy buena la metáfora del ventilador), su padre, un poderoso hacendado que siente la necesidad de preservar su herencia de dudosa procedencia a toda costa a través de las futuras generaciones de la familia (genial Chico Díaz, actor de moda en el cine brasileño), y el propio director de la película, que aquí encarna a un funcionario de la Embajada francesa quien a medida que el filme sigue avanzando, va cambiando sus registros.
El realizador le da un tono feminista a esta comedia, a la que además se le pueden sacar otras segundas y terceras lecturas. En ese sentido, no hay que perderse la escena de las chicas en un restaurante, muy ilustrativa de lo que el guion nos quiere contar.
©José Luis García/Cinestel.com