«Sabates Grosses», de Ventura Pons; ¡Gusta más reír que llorar!

Estreno en España
La parte derecha del Eixample de Barcelona es la zona elegida por el cineasta catalán Ventura Pons para abordar su nueva comedia, «Sabates Grosses» (¡Cuanto más grande, mejor!), película que tuvo su estreno mundial en el Festival de Cine de Guadalajara (México), en paralelo al importante anuncio de que Catalunya será el país invitado en la edición del año 2018, dentro de ese certamen internacional.
El nuevo filme de Ventura Pons parece haber sido gestado a través de innumerables experiencias personales vividas por él, y guarda relación con las comunidades de vecinos y, sobre todo, las típicas porteras de edificio chafarderas y charlatanas. Todo ello aderezado con un punto de actualidad (alquileres turísticos y corrupción económica) que hizo innecesario tenerse que inventar un contexto, ya que la misma coyuntura diaria se lo proporciona una vez más, tal y como suele ocurrir en sus películas.
«Sabates Grosses» o «Cuanto más grande, mejor!», según la lengua propia del lugar en que te encuentres, es una comedia coral con parte del equipo habitual de intérpretes que rodea al director. La actuación de Joan Pera como un aristócrata con profundas convicciones religiosas es lo más sobresaliente, en una película divertida y rodada en un barrio tranquilo y señorial de la ciudad de Barcelona, que además tiene un tipo de arquitectura muy vinculada a algunas otras viejas ciudades de Europa, como París.
El resto del elenco no se queda muy atrás en esa apreciación, con una Amparo Moreno «amb accent valencià» (però no va néixer a L’Hospitalet aquesta senyora?), la actriz cómica germano-escocesa Minnie Marx con su personaje haciendo un peculiar saludo al monumento a Rafael Casanova, un icono del catalanismo; e igualmente aparecen Pilar Martínez, Vicky Peña, Roser Vilajosana, Pedro Ruiz, Ricard Farré o Lucrecia, entre otros.
El idioma inglés también tiene cierta presencia en «Sabates Grosses», contribuyendo a consolidar la idea de que ésta es una historia de carácter cosmopolita, con un cura interpretado por Pedro Ruiz que pide un poco de energía para sus «asuntos», varios guiños al universo gay, o referencias a la estafa de las preferentes, la armonía entre catalanes y valencianos, y la ausencia de un antiguo inquilino de esos edificios, ex-alcalde de la ciudad y que ahora trabaja para la ONU.
Ventura Pons sigue dando muestras de que con humor la vida es mucho mejor, al tiempo que recrea espacios y modos de actuar muy diversos, a partir de elementos extraídos del ese mundo que le rodea y que inevitablemente influyen en su prolija carrera artística. Ahora dice que se ha reservado algunas historias dramáticas para convertirlas en película a partir del 2018, aun cuando toda buena comedia también suele tener su correspondiente trasfondo dramático.
©José Luis García/Cinestel.com