«El rey tuerto»; comedia dramática con conexiones a un hecho real

Estreno en España el viernes 20 de mayo
¿Ironías de la vida? El estreno de la obra teatral en la que se basa esta película coincidió con un lamentable suceso ocurrido en Barcelona allá por noviembre de 2012, cuando Esther Quintana perdió un ojo en el transcurso de una manifestación a causa de una pelota de goma lanzada por los policías antidisturbios. Lo cierto es que viendo tanto la obra de teatro como esta notable película no te puedes sacar aquello de la mente y que te afecte, aunque esté en clave de comedia negra.
Marc Crehuet ha contado para la adaptación con el mismo elenco teatral en una historia que se desarrolla en un único espacio, la casa de Lidia y David, quienes reciben la visita concertada para una cena de Sandra, vieja amiga de la primera, e Ignasi, un documentalista social que perdió un ojo a causa de una bola de goma en una manifestación, y no sabe que David es el policía que le disparó.
Reconociendo que lo que estamos viendo sería altamente improbable en la realidad, «El rey tuerto» es un guion que confronta la psicología de sus cuatro personajes principales, sobre todo la de ellos, pero también la de ellas, que son sus respectivas parejas, transformando el filme en un ejercicio exento de maniqueísmos que sirve de análisis libre acerca de los comportamientos y sus justificaciones.
Ignasi es un idealista que quiere la mejor calidad de vida posible para sí mismo y para sus conciudadanos. David es todo lo contrario: cree que lo que prevalece es la ley del más fuerte, se siente muy cómodo en lo que llama la «gestión de masas», y goza de unos privilegios y un salario (inclusive de una pretendida impunidad) que a su juicio justifica lo que hace como policía. Es obvio que no ha sido controlado como debiera por los psicólogos de ese cuerpo de seguridad y que tampoco ha sido reprendido por sus superiores por haberle reventado un ojo a Ignasi.
La gravedad de la crisis económica y los roles sociales que podemos llegar a adoptar de manera individual son temas que están presentes en la película, narrada en tono de comedia negra con algunas partes dramáticas que más que nada son los síntomas de una impotencia e incertidumbre.
«El rey tuerto» deja entrever constantemente unos informativos de televisión que deforman la realidad con un discurso político falso y repetitivo, lo mismo que les ocurre a algunos de los personajes del filme. Y la inclusión de alguna puesta en escena muy puntual que recuerda la procedencia teatral original no hace otra cosa sino que aferrarse tenazmente a la idea de que primero son la educación, los valores, la sinceridad y el respeto antes que pasar a toda la representación diaria cotidiana en nuestra vida como personas y como profesionales.
Los protagonistas de la película son Alain Hernández, Betsy Túnez, Miki Esparbé y Ruth Llopis. En algunos cines se estrena como «El Rei Borni».
©José Luis García/Cinestel.com