«Lejos del mundanal ruido»; atracción en unas relaciones desconcertantes

Estreno en España el viernes 12 de junio 2015
El director danés Thomas Vinterberg nos ofrece una espléndida adaptación de la novela homónima del escritor inglés Thomas Hardy, su texto más reconocido, y rinde tributo a uno de los mejores novelistas y poetas británicos. El giro que se produce al principio de la historia ya nos da alguna pista acerca de su capacidad para sorprender al público. «Lejos del mundanal ruido» es una película que nos traslada a las postrimerías del siglo XIX en unas aldeas costeras al borde de unos acantilados. Bathsheba Everdene (Carey Mulligan) es una joven orgullosa y bella, algo vanidosa, que acaba de llegar a la casa de campo de su tía con el propósito de quedarse a vivir con ella. Gabriel Oak es un pastor prometedor que se enamora de la chica.
Al inicio del filme, Oak, interpretado por el actor belga Matthias Schoenaerts, le hace una oferta de matrimonio que ella rechaza aduciendo que valora mucho su independencia y muy poco a él. La siguiente vez que se ven, sus respectivas vidas han cambiado radicalmente porque se hallan en contextos completamente diferentes. De todos modos, parece que a Gabriel le sigue atrayendo la terquedad de Bathsheba, mientras que a medida que avanza el relato y ellos se van conociendo, otros dos pretendientes se sumarán añadiendo una tensión casi siempre contenida. Uno de ellos es un apuesto y temerario sargento, y el otro un vecino soltero, rico y maduro. Paralelamente se cruza otra historia de amor entre el militar y una antigua sirvienta de Bathsheba.
Con todos estos componentes y algunos más que tiene el guión, lo cierto es que inclusive habría dado para hacer una miniserie televisiva, pero aquí Vinterberg ha obrado con tanta sensatez y responsabilidad, sabiendo a la perfección lo que estaba haciendo, que nos proporciona un relato con unos seres complejos que no sólo huye de lo estereotipado, sino que también conoce los riesgos narrativos que tiene el melodrama y los evita con mucha validez y eficacia.
La buena actuación de Carey Mulligan encarnando a una mujer con diversos matices, ruda, terca, pero a ratos divertida, al tiempo que navega en un mar de contradicciones tratando de ignorar sus sentimientos, fue clave para el desarrollo de una película sobre dos personas que se gustan: ella realmente cree que no lo necesita mientras que él intenta transmitir sus emociones sin hablar mucho sobre ello.
Romance, feminismo, atracción, compromiso, clichés sociales, tragedia, culpa y desesperación son algunos de los ingredientes que conforman el todo de este filme muy bien contado e interpretado, en el que para quien no haya leído la novela, nada será previsible. Completan el elenco principal Michael Sheen, Tom Sturridge, Juno Temple y Jessica Barden.
©José Luis García/Cinestel.com