«El último Elvis» de Armando Bo, ser otro y creérselo

Los referentes y mitos son siempre interesantes y hasta necesarios para construir la personalidad de cada cual, pero cuando esa admiración se convierte en una obsesión hasta el punto de creerse el admirado y emplear su estética, sus gestos y hasta su voz, la situación es bien compleja.
Armando Bo, el nieto de, el hijo de, publicista talentoso y co-guionista de «Biutiful» fue premiado en Horizontes Latinos por esta película que obtuvo gran repercusión en Argentina.
En «El último Elvis» nos encontramos una película sobria, con pocos diálogos y de estructura firme sobre un tipo que vive dentro de otro hasta el punto de que se niega a sí mismo.
El conflicto le viene cuando tiene que hacerse cargo de su hija enfrentándose a dos realidades diferentes que ponen en entredicho su idea de la libertad.
El protagonista John McInerny debuta como actor con mucho mejor manejo en el plano musical que en el resto durante su trabajo diurno o cuando tiene que relacionarse con su hija. Impecable la reconstrucción de Graceland al final de la película como colofón de esta historia que transita entre la perfección y lo patético a través de una realidad paralela.
McInerny es en su vida cotidiana un arquitecto que nunca había actuado y que tiene una banda tributo que se llama «Elvis vive». Fue convocado para preparar al actor que iba a hacer esta película pero un par de meses antes de filmar no se llegó a un acuerdo con ese actor y le hicieron a él la propuesta de protagonizar «El último Elvis». Aceptó y estuvo ensayando cinco meses. Bajó cuarenta kilos de peso para la película.
Respecto a la música, Bo dijo en San Sebastián que no todos los temas son de Elvis pero «se pagaron los derechos para usarla. Fue una inversión bastante importante. Grabamos los temas en estudio pero usamos playback de sonido y él cantaba por sobre del tema, lo cual fue espectacular porque se le ve a él sacando esa energía y emoción y eso fue algo muy importante que está buenísimo para la película, esa realidad que se logra, porque no es que esté haciendo que canta sino que saca una energía importante».
©Carlos Bermúdez/Cinestel.com