Juan Minujín será en el cine el superhéroe argentino Zenitram
Con una sólida carrera teatral, Juan Minujín irrumpió en el cine con el nada sencillo rol de un escritor con VIH que se entregaba al cruel placer del sadomasoquismo en “Un año sin amor”. A dos años del estreno de aquel film, Minujín se ha convertido en uno de los actores más ocupados de la Argentina, teniendo para este 2007 dos lanzamientos muy diferentes, “El cielo elegido”, donde da vida a un sacerdote en crisis y “Zenitram”, una coproducción entre Argentina (Kaos), España (Telespan 2000, Estudios Picasso) y Brasil (Jaguar)en la que es nada menos que el primer superhéroe argentino, que debe luchar contra las multinacionales que controlan el acceso al agua.
Pero por estos días, Minujín está pendiente de su primer trabajo detrás de cámara, “Guacho”, un cortometraje sobre la relación padre-hijo que forma parte de la competencia oficial del 9º Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (Bafici), en el que el intérprete de 31 años asume los roles de director, actor, guionista, montajista y músico.
– Presentas en el Festival de Buenos Aires tu primer trabajo como realizador, ¿Qué te motivó a incursionar en la dirección y narrar esta historia en particular?
«Desde que empecé a trabajar en cine como actor me atrajo mucho la dirección. Tenía muchas ganas de narrar algo de lo cual yo fuera autor, y el lenguaje cinematográfico me resultaba mucho más interesante y natural que el teatral, así que, luego de escribir un guión de un largo que se pospuso y se pospuso, me decidí a escribir un corto y dirigirlo. Esta historia en particular fue surgiendo como fantasías tormentosas de un actor, un hombre, un hijo».
– Tras la experiencia, ¿la dirección se quedará en una experimentación o definitivamente será una veta a explotar?
«Definitivamente será una veta que trataré de desarrollar. De todas formas disfruto muchísimo de mi trabajo como actor en cine. Pero sí…supongo que de a poco irá tomando forma un largometraje que tengo en la cabeza y en un tiempo lo filmaré… me encantaría».
– ¿Cuáles son las diferencias entre las historias que te interesan contar desde tu lugar de narrador-director y cuáles como actor?
«Como actor me preocupa básicamente la línea del personaje y sus vínculos con los otros y en como avanza la historia. Pero no pienso ni por un segundo en la música que tendrá tal escena, o como se montará tal secuencia, etcétera. Como director estoy muy centrado en el relato total, en qué está contando la película, en qué tiempo necesita una escena o una transición en función del montaje que tengo en la cabeza o la música que acompañará ese momento».
– Recientemente se te pudo ver, brevemente, en “Ciudad en celo”, pero para este año tenés dos títulos muy distintos para estrenar como protagonista. En primer lugar está “El cielo elegido”, una película donde das vida a un sacerdote y “Zenitram”, donde sos nada menos que el primer superhéroe argentino. ¿Qué podés adelantar sobre estas películas?
«Espero con mucha ansiedad el estreno de esas películas, son realmente distintas entre si, y fueron hechas también de formas muy diferente. Creo que “El cielo elegido” es una película compleja, de una trama muy interesante y con un personaje con fuertes problemas internos. Fue realizada con una calidad increíble, el director Kino González tenía muy en claro lo que quería contar y lo tradujo, a mi criterio, extraordinariamente bien en imágenes. Para mi fue un placer y un privilegio formar parte de esa película y trabajar junto a él.
En el caso de “Zenitram”, realmente no he visto mucho y no tengo muy en claro el tono que terminará teniendo la película. Pensando que más de la mitad de la película fue filmada con un fondo verde, creo que tendremos que esperar a ver como queda. En principio la historia es buenísima y creo que está muy bien filmada».
– Muchos actores cuando interpretan un personaje relacionado con lo religioso, confiesan que ello les lleva a cuestionarse su propia fe y muchas veces cambiar su pensamiento, ¿Qué te sucedió a vos con “El cielo elegido”?
«La película no me cambió mucho la forma de pensar sobre esto, siempre tuve una fe muy profunda y siempre pensé que la Iglesia es una de las instituciones más hipócritas y crueles que existieron».
– “Zenitram” es tu primera película con un gran presupuesto y un elenco internacional, que incluye a los españoles Jordi Mollà y Verónica Sánchez y el cubano Steven Bauer, siendo además una cinta con muchos efectos visuales, ¿Cómo fue el rodaje?
«El rodaje fue muy divertido y muy duro a la vez. Fue hermoso trabajar con ese elenco, me divertí muchísimo, realmente fue muy lindo ver como trabaja cada uno de ellos, como entendía la película y sus personajes. Por otro lado fueron 10 semanas (la mayoría nocturnas) muy duras, de jornadas largas colgado de un arnés, por momentos de trabajo muy solitario, días y días estaba yo, la pared verde y nada más».
– ¿Cuáles son tus proyectos inmediatos en cine?
«Acabo de terminar de filmar la ópera prima de Lucia Cedrón, “Cordero de Dios”, una historia que me conmovió muchísimo, con un guión súper sólido. Y la semana que viene comienzo a filmar un telefilm con Ulises Rosell sobre crímenes políticos en los años 70. Para más adelante hay cosas dando vueltas pero nada concreto todavía».
– Tras ser sadomasoquista, sacerdote y superhéroe, ¿Qué tipo de personaje te gustaría interpretar?
«Me interesan los personajes a los que les puedo encontrar un costado vulnerable, que no son planos, que son más bien bollos de papel que uno puede ir abriendo y descubriendo pliegues, arrugas, contradicciones, roturas».
©Cynthia García Calvo/Cinestel.com Buenos Aires – Argentina