Los cineastas argentinos recuperan su vilipendiado Instituto de Cine

No se recuerda en el INCAA una gestión tan desafortunada como la del presidente saliente, Ralph Haiek, quien decidió poner fin a su relación con el Instituto Nacional del Cine y las Artes Audiovisuales un día antes de la asunción del nuevo gobierno, según él, para “facilitar” el acceso de los nuevos gestores.
El caso es que Haiek va a tener ahora, una vez que ha sido sustituido por Luis Puenzo, que defenderse ante los juzgados de Comodoro Py por varios de los lineamientos de su gestión, pues tres entidades de cineastas (DOCA, DIC y APRI) lo han denunciado por “malversación de fondos”, “incumplimiento de los deberes de funcionario público”, “incumplimiento de la cuota de pantalla” aprobada para el cine argentino, “falta de transparencia” durante su mandato, y “haber dejado de otorgar créditos de fomento”, al parecer colocando en una situación muy delicada algunos de los rodajes en curso.
Luis Puenzo, el nuevo presidente del Instituto, inicia su gestión decidiendo llamar a consulta a los diversos componentes del sector audiovisual, así como a los trabajadores del organismo autárquico. Lo hizo en una comparecencia pública que se convirtió en una asamblea, durante la cual hubo la participación de numerosas entidades que desde hacía tiempo no se veían las caras, al tiempo que anunció el ofrecimiento de un cuestionario para quienes deseen explicar cuál es su situación y puntos de vista dentro de la industria.
“Sabemos que este proyecto que encaramos ahora es muy difícil y no ignoramos, de ninguna manera, en qué momento del país lo hacemos, (…) un momento que tiene muchísimas prioridades. En Argentina hay cine porque siempre lo tuvimos; parece una boludez pero no lo es. Acá siempre hubo una tradición y somos muy respetuosos de ella, así que vamos a ser muy leales al cine argentino” -dijo Puenzo durante su primera toma de contacto en persona con el sector, tras su designación-.
El oscarizado Luis Puenzo, director y productor de cine, fue uno de quienes estuvieron presentes en la redacción de la actual Ley de Cine, aprobada por el Congreso de la Nación en 1994, tras dos años de intenso trabajo. Él es de la idea de que el cine tiene que salir adelante con la participación de todos juntos. Para este nuevo emprendimiento suyo al frente del INCAA se ha rodeado de un nuevo equipo de gerencia en el que se encuentra Nicolás Batlle como vice-presidente.
Puenzo: “El cine ya no es solo cine, el cine es el audiovisual…”
El realizador de “La Historia Oficial” dijo en unas declaraciones que brindó a Telam que hay que tener en cuenta que “el cine ya no solo es cine, el cine es el audiovisual”, aunque eso ya lo reflejaba el espíritu de la Ley de 1994, texto que deberá ahora ser revisado para poder incorporar una regulación de los nuevos servicios que son canalizados a través de los dispositivos digitales.
El cumplimiento irrestricto de la ley en lo que se refiere a las obligaciones de exhibición de cine argentino en salas comerciales es otro de los puntos fundamentales que llevará a cabo la nueva gestión, tras la dejadez del tema por parte del equipo saliente. Según el nuevo presidente, el INCAA velará tanto por la creación de nuevos públicos como por el mantenimiento del concepto colectivo de las salas de cine como elemento vertebrador de la experiencia comunitaria.
Igualmente, el apoyo a la creación de un mayor número de series televisivas, así como un cambio de mentalidad en las políticas del Instituto para que se entienda que la gestión del organismo no dura hasta que las películas llegan a copia, sino que hasta cuando se estrenan, son otras de las medidas que Puenzo pondrá en práctica.
Los cineastas proponen
A pocos días de que los nuevos cargos asumieran su puesto, ya comenzaron a llegar las nuevas propuestas de las agrupaciones de directores y directoras de cine, como es el caso de la Mesa de Directores formada por veinte entidades distintas, quienes solicitaban:
- 1. Derogar el artículo 4 de la Ley 27.432 que pone caducidad al Fondo de Fomento Cinematográfico para 2022.
- 2. Generación de vías de fomento de ventanilla continua con financiación asegurada por etapas de producción, y al mismo tiempo garantizar una vía con acceso a créditos otorgados por el INCAA con tasas acordes a las necesidades de la industria.
- 3. Concursos acordes a las necesidades de generar pluralidad y fomentar el acceso a los sectores relegados.
- 4. Políticas activas de género que incluyan a mujeres cis, mujeres trans, varones trans, travestis, transexuales, lesbianas y/o identidades no binarias.
- 5. Políticas para fortalecimiento de las PYMES.
- 6. Apoyo real al lanzamiento y distribución de las películas que reciben fomento.
- 7. Intervención estatal en la distribución cinematográfica, haciendo cumplir con rigor la cuota de pantalla y generando un circuito competitivo de cines estatales a precios populares.
- 8. Potenciar programas de Formación de Audiencias y del uso de la cultura como un bien social.
- 9. Protección del patrimonio del cine nacional, puesta en marcha de la Cinemateca y Archivo de la Imagen Nacional (CINAIN) y creación de la cinemateca nacional.
- 10. Engrosar el Fondo de Fomento Cinematográfico con la percepción de impuestos sobre las OTTs (servicios de transmisión de contenidos a través de internet).
En términos muy similares se manifestó por su parte la Asociación de directores de cine PCI, la cual centra sus políticas en la generación de espacios de trabajo colectivo, como fue la realización del Primer Foro Audiovisual de la Argentina.
©José Luis García/Cinestel.com