“Love Me Not”; imaginativa película del irreverente Lluís Miñarro

La presentó en la más reciente edición del D’A Film Festival de Barcelona, luego de haber tenido la premiere mundial en el de Rotterdam.
El director y productor Lluís Miñarro sigue siendo tan insólito y rompedor de moldes como siempre. Amante del buen cine y de una perfecta y aguda irreverencia que debería de ser más habitual en nuestras pantallas, el cineasta llega de nuevo a festivales con otra de sus enormemente abracadabrantes sorpresas.
“Love Me Not” es una película de deseos perversos y rechazos amorosos. La acción tiene su inicio en el medio del desierto, donde un misterioso hombre está retenido en una prisión de máxima seguridad y custodiado por un regimiento entero.
La soldado Salomé es asignada para vigilar de forma constante al prisionero, situación por la cual comienza a obsesionarse con él, lo que abre una etapa con posibles malas consecuencias.
La prioridad de Miñarro ha sido la de mantener la cineturgia que emanaba también de sus anteriores filmes, un aspecto que comporta la traslación al cine de una especie de teatralidad, para cuyo éxito ha contado con la colaboración de los distintos actores que componen el elenco, entre los cuales están Ingrid García Jonsson, Francesc Orella, Lola Dueñas y la participación como personaje del director gallego Oliver Laxe.
El guion de esta rocambolesca historia parte del interés que su director tiene en la contemplación de la espera, una premisa que también acompañaba a sus relatos anteriores y que es vital para llegar a los distintos desenlaces de sus películas, en los que la banalidad del mal y lo inhumano están presentes de una manera u otra.
Es “Love Me Not” igualmente una historia anti-belicista, que incide también en la arrogancia de la política y en las diferencias de género. Además, Miñarro está de acuerdo en que puede llegar a ser vista como un relato cínico “aunque en el fondo lo que prevalece es el amor. Más cínico me parece que existan guerras como la de Irak donde está muriendo la gente, y que no se acepten las diferencias sexuales o un desnudo masculino en una película” -explicaba durante la presentación del film a los medios en el marco del Festival-.
A Miñarro le gusta que la energía de una secuencia “se traspase a la siguiente. Crear desconcierto, pero novedad continua, donde nada obedece a una linealidad narrativa. No es normal el clasicismo implantado ahora ni el pensamiento político actual, ni el momento que vive la sociedad de Europa actualmente con respecto a lo que se vivía en los años 70 u 80.”
Objeto y fantasía audiovisual
El cineasta catalán busca en sus filmes lo que denomina “objeto y fantasía audiovisual” y a partir de unas bases, es capaz de mezclar géneros cinematográficos y apostar por cambios cromáticos en la imagen que recreen atmósferas distintas dentro de una misma historia.
También los actores tienen un grado de libertad creativa que es muy poco usual en otros directores, con la condición de que sigan el eje de la situación y de los personajes que está marcado desde el guion. “Explico lo mínimo posible a los actores y a los técnicos a partir del guion original, que de alguna manera sirve para estructurar lo que hay que hacer” -contaba en Barcelona-.
“Love Me Not” es una película que posee influencias de la estructura de “Simón del desierto” de Luis Buñuel, donde en su segunda parte, el personaje de Silvia Pinal fungía como el demonio conviviendo con el profeta Simón en Nueva York. Igualmente Miñarro reconoce que su fascinación por los melodramas de Douglas Sirk ha hecho inevitable que en algunos momentos se pueda percibir en el filme esa influencia, la cual contribuye sin duda al clima de subversión narrativa que posee el filme.
©José Luis García/Cinestel.com