Pantalla Pinamar: después de lo previsto (3) Asesina en serie, Catalunya, Italia…

La mujer lobo de Tamae Garateguy que selecciona a sus víctimas en el Subte de Buenos Aires, el leridano Ramon Térmens con su visión acerca de la inmigración en Catalunya, la monarquía holandesa ficcionada con la princesa argentina Máxima incluida, el decaimiento del cine italiano y los problemas para encontrar vivienda en España constituyen algunos de los temas presentados en películas del encuentro pinamarense.
Garateguy (UPA, Pompeya) hizo un adelanto del largometraje en etapa de posproducción con el título de «Mujer Lobo». Mónica Lairana es la actriz protagonista cuyo rol principal es el de devorar hombres. Su técnica es muy precisa: contacta con ellos en el Subte, tienen sexo y a continuación los mata.
Narrada en blanco y negro, la película está asentada sobre una base de terror. Tamae está elaborando una trilogía en la que presenta personajes extremos en situaciones extremas.
El director catalán Ramón Térmens vio plenamente respaldado por la crítica argentina su trabajo de «Catalunya Uber Alles». En Pinamar explicó el origen de esa expresión, habló sobre la realidad de los inmigrantes en su ciudad natal que intentó reflejar en el film y puso de relieve la oportunidad de crear historias de ficción a partir de simples titulares de diarios.
Térmens adelantó en entrevista para Cinestel que espera tener listo para exhibir en la clausura de la Mostra de Cine Latinoamericano de Cataluña un documental sobre la vida de un profesional de la actuación muy estimado, admirado y respetado por quienes le conocieron.
La actriz protagonista holandesa Carine Krutcen dio cuenta de las pretensiones de «Majestad» (Majesteit), una cautivante y «muy realista ficción política» en torno a la reina Beatriz y la familia real holandesa. La película se centra en una reina depresiva que incluso hubiese preferido haber nacido para ser republicana y se inmiscuye en aspectos privativos para la opinión publica, como el hecho de que fuma y besa en la mejilla pero nunca en público.
Estuvieron asimismo en Pinamar varios miembros de la Comisión de filmaciones de Italia, un país en el que, según reportaron, se filma cada vez menos, es muy difícil conseguir pantallas y no se puede rodar nunca un film si no es con el apoyo de alguna televisión. Los productores independientes no existen y el cine de autor es imposible porque carece de apoyo económico.
A ello se suma que los profesionales italianos en general son más bien reacios a salir personalmente para promocionar su cine fuera de sus fronteras si no es en Cannes. Respecto a las producciones, parece que únicamente hay espacio para las comedias. Quedó claro que el pesimismo se ha adueñado de quienes quieren hacer cine independiente en ese país.
Por último, la actriz hispano argentina Malena Alterio, que tuvo que aclarar que su acento español viene derivado de que, aunque nació en Buenos Aires, se fue a vivir a España por el exilio de sus padres en los 70, ofreció pormenores sobre el filme ganador en Málaga «5 metros cuadrados» de Max Lemcke. Se escribió el guión antes de la llamada crisis económica española y el tema que aborda, la dificultad para acceder a una vivienda hoy en día, sostuvo que es universal y que, tras la proyección del film en un festival de Canadá, le sorprendió que le dijeran que también allá existe.
Con su padre y hermano, también actores, solo ha trabajado conjuntamente en un corto llamado «Entre nosotros». Su próximo trabajo en cine parece que estará dirigido por el mallorquín Agustí Villaronga y tiene que ver con relaciones históricas entre Argentina y España.
©José Luis García/Cinestel.com Pinamar – Argentina