La Academia de cine española abre una sala en los Cines Verdi

Cuando se cumplía casi un año de la adquisición de la mayor parte de las acciones de los complejos de salas de cine Verdi en Barcelona y Madrid por parte de A contracorriente Films, la Academia española de las Ciencias y las Artes Cinematográficas ofreció una rueda de prensa en la capital de Catalunya para presentar el cambio de nombre de la que hasta ahora era la Sala 4 en los locales situados en la calle Verdi 32 de Barcelona, que pasa a denominarse Sala Academia.
La decisión es fruto del acuerdo alcanzado con el actual propietario, el esforzado productor, distribuidor y exhibidor Adolfo Blanco, fundador y consejero delegado de la empresa, con el que se pretende dar servicio a los numerosos académicos que viven en cualesquiera de las comarcas que integran el territorio catalán, quienes podrán acudir a un pase exclusivo para ellas y ellos los jueves, mientras que el resto de la semana se repetirán las películas que se ven en los ciclos de Madrid.
El acuerdo entre la institución que anualmente concede los Premios Goya y la empresa Espectarama que gestiona los cines, contempla que de viernes a miércoles el público podrá acceder a la Sala Academia a un precio reducido para ver esas mismas películas que ofrece en sus ciclos la sala ubicada en la sede académica de Madrid.
Además de Blanco, estuvieron en el acto de la presentación en Barcelona el presidente de la Academia, Antonio Resines; el vicepresidente segundo, Edmon Roch, quien también es vocal de la Acadèmia del Cinema Català y que sirve de puente entre ambas instituciones dedicadas al cine; y Porfirio Enríquez, el director general.
La colaboración de la Academia española con A contracorriente viene de lejos, pues desde hace tiempo se lleva a cabo en la sede madrileña un lunes de cada mes, un pase privado de cine europeo para los académicos. La idea es reproducir todo lo que se venía haciendo en Madrid, pero en este caso para que los miembros que residen en Cataluña lo puedan ver igualmente. El propósito para un futuro a medio plazo es que esta descentralización de las actividades de exhibición y promoción del cine autóctono no se detenga aquí, y que en otros territorios del Estado español se llegue a acuerdos similares a éste.
Antonio Resines hizo coincidir su visita a Barcelona con el anuncio del adelanto en casi un mes del periodo de votación de los filmes españoles que podrán concurrir al premio Oscar en lengua no inglesa. Ahora, las películas se enviarán a Hollywood para su evaluación el 7 de septiembre, en lugar de lo que siempre se hacía de esperar al último día de plazo que es el 1 de octubre. Asimismo, otra de las primicias que dio fue que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte estaría a punto de entrar como patrono en la Fundación de la Academia.
©José Luis García/Cinestel.com