“La Vuelta al Campo”; la reforma agraria y la soberanía alimentaria

Estrenada en Argentina
Tras diez años de investigación sobre el terreno, el director Juan Pablo Lepore ha seguido tras la pista del resurgimiento de la agroecología en algunas zonas de Argentina y Brasil.
La tradicional agricultura biológica se diferencia de la que actualmente es mayoritaria en que no utiliza venenos como herbicidas o pesticidas en sus modos de producción.
“La Vuelta al Campo” es un filme documental concebido con el propósito de “visibilizar y acompañar a los colectivos sociales que se oponen día a día a las injusticias de las políticas económicas neoliberales, al desarraigo, al avance de la frontera agrícola proponiendo una perspectiva concreta de producción de alimentos con la finalidad de abastecer de comida sana, sin la utilización de venenos, a las ciudades y centros poblados”.
La película es un homenaje a quien fue una de las mentes más lúcidas del panorama social argentino: Osvaldo Bayer, quien aparece en dos momentos concretos hablando sobre los temas que trata este film. Igualmente, en otras partes de esta aproximación al universo de la agricultura con visión de futuro, se cita a “La tierra quemada” (1964), de Raymundo Gleyzer y “Río Seco” (2012), de Abelardo Cabrera.
Bajo el epígrafe de “Luchas campesinas por el buen vivir”, Lepore abre su narración con la represión policial ocurrida en Constitución el 15 de febrero de 2019 contra quienes protestaban por el hecho de la inexistencia de políticas públicas para el pequeño productor agrario. Además en este punto se afirma que existe un gigantesco éxodo y expulsión de gente del campo hacia las grandes urbes, e inclusive dentro de la misma ciudad, que estaría poniendo en grave riesgo la alimentación del país.
En su desarrollo posterior, el filme pone los puntos sobre la íes en cuestiones como la posibilidad legal de que ocurran ocupaciones pacíficas de terrenos cultivables por parte de pequeños agricultores, en una lógica que tiene que ver con que el ejercicio de la soberanía alimentaria permita a los pueblos tener la posibilidad de decidir qué alimentos producir, en lugar de tener que trabajar para un patrón que solamente primaría el beneficio económico a toda costa, sin necesidad de razonamientos orgánicos y de salud.
Justamente los agricultores orgánicos que aparecen en el documental, tanto en Brasil como en Argentina, respetan el medio ambiente no usando productos químicos y huyendo de la ganadería industrial y de los cultivos monotóxicos. De hecho, ya existen en la provincia de Buenos Aires once cooperativas agroecológicas y un mercado en Avellaneda dedicado exclusivamente a los productos biológicos.
“La Vuelta al Campo” es una película que pone el foco alrededor de uno de los desafíos más importantes que la población deberá afrontar durante este siglo que ya ha comenzado su tercera década: la tendencia a acentuar la pobreza y peores condiciones de salud con motivo de la implantación de modelos como el transgénico, que está basado en la utilización de un gen marcador que contiene resistencias a antibióticos o en saltarse las barreras entre las especies. El film propone en ese sentido, un retorno a los valores de la sabiduría popular.
©José Luis García/Cinestel.com