Rodrigo Moreno estrena «Un mundo misterioso» en Argentina

La han llamado una «película analógica» por su connotaciones nostálgicas como el gusto por la Soda, el Bianchi Borgoña, el Tocadiscos o el Renault 6. Rodrigo Moreno estrena este 4 de agosto en Argentina su último film que pasó por la Sección Oficial de la Berlinale y por el Bafici de Buenos Aires. Se trata de una película de narrativa libre y espíritu anárquico que gravita en torno a esa pregunta sobre la que no podemos hallar respuesta: ¿qué es el tiempo?
El desencuentro con Ana (Cecilia Rainero) le permite a Boris (Esteban Bigliardi) encontrarse con otras mujeres y con algunos amigos. De fondo está Buenos Aires en su lucha por recuperarse a sí misma. Una ciudad con estilo propio. Una película sobre una ciudad y sobre algunos habitantes de esa ciudad. Recuperar el estilo propio de Buenos Aires antes de que desaparezca. Una película en extinción. Boris avanza en sus treintas. Este es el último grito de una ciudad y este es también el último grito de juventud.
Según Rodrigo Moreno «una crisis propone un tiempo interesante porque hay que construir nuevas reglas, incluso la posibilidad de que no haya ninguna regla que rija nuestro destino. Después de haber hecho una película con una métrica tan intensa como en El custodio, necesitaba transitar un camino más incierto, menos señalado y esta historia apareció como la confluencia de varias ideas que tenía en la cabeza y con la fuerza de la necesidad: necesitaba perderme, necesitaba abrir puntas sin saber adónde me iban a llevar. Boris y el tiempo de separación expresan la parte narrativa de esa necesidad. La separación es también una oportunidad narrativa para explorar y desviarse junto con los personajes y contar bajo la única égida del capricho.
La película está basada en estos puntos de fuga en los que se monta incluso sin saber si es capaz de enderezar el rumbo perdido. Es una idea de narración desobediente y un poco anárquica que me atrae mucho».
El personaje de Boris, a quien no conocemos, es el transporte para conocer a los otros personajes de la película. Un viejo automóvil obsoleto marca las distancias entre los dos personajes principales pues marca la dependencia que puede tener cualquiera sobre aquellas cosas que son inmanejables. «el amor podría incluirse en esta categoría -explica Moreno- y es por eso que me gustaba representar el tiempo inconmensurable que se propone en el inicio del film con la vida útil de este coche. Ese tipo de coincidencias absurdas, caprichosas, contribuyen a que el mundo parezca misterioso e inexplicable».
El director prefirió trabajar con un equipo pequeño formado por 12 profesionales encontrando «una manera de trabajar profesionalmente sin la presión del profesionalismo»
«Un mundo misterioso» termina con una grabación inédita de Carlos Gardel que impresiona al espectador por su originalidad. Otro de los temas musicales también es inédito y está cantado por Atahualpa Yupanqui.
(cba/rbc)