«Truffaut el Insurrecto» de Alexandre Moix; una personalidad a revisión

El 21 de octubre de este año se cumplen 30 años del fallecimiento del gran cineasta, crítico y actor francés François Truffaut, quien como es sabido, aunque se inició de manera profesional en la llamada ‘Nouvelle vague’, evolucionó hacia formas de concebir y hacer cine muy particulares que sin duda alguna tuvieron una relación directa con los acontecimientos de su vida personal, tal y como pone de manifiesto este documental encargado por el canal europeo Arte al director francés Alexandre Moix, que se comenzará a ver coincidiendo con ese aniversario tan señalado para muchos cinéfilos que ven en Truffaut un gran referente del cine a todos los niveles, con su considerable fama mundial.
Moix retrata al director francés desde una vertiente íntima a partir de cierta correspondencia personal cuyo contenido revela su lado insurgente y de rebeldía ante ciertos dogmas presentes en la sociedad. Presentando entrevistas con estrechos colaboradores, amigos y familiares, «Truffaut l’insoumis» compila todas esas piezas sueltas para terminar uniéndolas de manera segura a aquellos rasgos, preocupaciones y alegrías que proyectaban sus personajes en películas tan renombradas y emblemáticas de su filmografía como son «Los 400 golpes» o «Jules et Jim».
A lo largo de los 52 minutos que dura esta obra, conoceremos de un modo muy preciso y sin rodeos que la hubiesen alargado innecesariamente, cómo las películas de Truffaut expusieron en sus historias algunas señales y marcas que se correspondían con vivencias anteriores del cineasta, como puede ser la eventualidad de que nunca llegara a conocer a su padre. La película contiene partes de una entrevista a Truffaut e incluso un fragmento de unas declaraciones de Jean Renoir en el que lo definía como «un poeta de la vida» y elogiaba la atmósfera de divertimento que se respiraba en todos los rodajes de sus películas.
El documental también revisa la contundencia de algunas de sus críticas de cine, como aquella que tituló «El cine británico ha muerto», y repasa el contenido de sus guiones cinematográficos no sólo enlazándolos con la orfandad afectiva que sufrió de sus padres, teniendo que ser criado por sus abuelos, sino también con su infancia conflictiva y fantasiosa que fue un tema bastante recurrente en sus películas. La parte que explica la forma que tenía de dirigir a los niños es uno de tantos fragmentos a tener en cuenta que contiene este filme.
«Truffaut el Insurrecto» es asimismo una interesante y bien planteada mezcla de testimonios de personas que tuvieron algún tipo de relación personal o profesional con el gran cineasta. Aparece unas cuantas veces quien fuera su esposa, Madeleine Morgenstern, de quien se separó a los nueve años de casado pero con quien siguió manteniendo una buena relación y se veían con frecuencia, ya que habían tenido dos hijos en común.
También están en el documental las declaraciones del humorista e imitador Claude Véga, que fue compañero de estudios de Truffaut; Liliane Siegel, escritora con quien mantuvo correspondencia y estudiosa de la obra del filósofo Jean-Paul Sartre, escritor a quien el cineasta admiraba; el guionista, dramaturgo y productor Jean Gruault, muy próximo a los directores relacionados con la ‘Nouvelle vague’ y que incluso trabajó como guionista para algunos de ellos; el director y escenógrafo Claude de Givray, muy cercano a Truffaut y que también escribía críticas para Cahiers du cinéma; el actor Jean François Stévenin; y el abogado Georges Kiejman que fue el primer marido de la actriz Marie-France Pisier que trabajó tanto con Truffaut, como con André Téchiné, Jacques Rivette, y que fue considerada musa de Luis Buñuel.
©José Luis García/Cinestel.com