«Equipo Verde» de Alejandra Almirón; reflexión sobre pasado y presente

¡Anoche soñé que volvía al colegio! dice un intertítulo al inicio de este documental que se propone una profunda reflexión generacional a partir de las vivencias de un grupo de amigas de la infancia que se vuelven a reunir más de 30 años después de aquel 1978 para recordar lo que sucedía en aquella escuela secundaria de Buenos Aires en la que estudiaban y tratar de reflexionar acerca de cómo hemos evolucionado las personas en este tiempo hasta llegar a nuestros días.
La realizadora ha juntado a sus dos amigas, Cristina y Elvira, que formaban parte del denominado Equipo Verde y que están dentro de lo que ellas consideran la primera camada de jóvenes sin proyectos colectivos que siguió al genocidio de la dictadura, lo que Almirón llama «las teen de diseño que los militares anhelaban».
La película discurre en gran parte en el mismo centro educativo en el que estudiaron las tres y comienza con una identificación de los lugares y objetos que necesariamente han quedado grabados en el subconsciente porque son parte de una época y unas vivencias que nunca más volverán. En ese plano sobrevive la nostalgia de aquellos momentos de amistad vividos entre las tres pero no la melancolía sobre cómo estaba construida la sociedad, pues desde su visión actual, aquella fue una etapa de la vida ciudadana en la que las rigideces se imponían en muchos terrenos de la vida, no sólo en el educativo donde era normal llevar uniforme, sino que también en muchos otros órdenes de la convivencia en común.
De las distintas conversaciones que se van sucediendo a lo largo de «Equipo Verde» hay que destacar que a pesar de la existencia de lo que alguna de ellas denomina «la extraña energía de la post-dictadura» mediante la que parecía posible una salida hacia adelante en favor de la libertad de ideas y proyectos, lo cierto es que lo que nuclea las relaciones sociales entre los individuos es la gestión del miedo por parte de los poderes.
La diferencia entre aquella y esta época se fundaría, según los testimonios del documental, en que en los ’70 tenían miedo a que les viniese un castigo, que en el terreno escolar podría ser incluso físico, donde se fomentaba el alumnado sumiso y se reprimía la división de ideas, mientras que ahora ya no se emplea la fuerza pero, paradójicamente, se sigue teniendo miedo a ser independiente pero por otros motivos; es otro tipo de miedo.
Si en la época anterior los deseos de algunos eran de salirse de aquel sistema para poder diferenciarse aunque eso implicase riesgos importantes de represión física y carcelaria, parece que ahora el miedo a ser independiente se sustentaría en la necesidad que algunos sienten de entenderse con la gente teniendo las mismas conductas, aunque una de las protagonistas, Elvira que vive en España, considera que los argentinos analizan demasiado las cosas mientras que Cristina cree que somos hormigas y que la humanidad es patética.
«Equipo Verde» cuenta además con otros testimonios que vivieron aquellos días, como una perceptora que todavía trabaja en el centro educativo y también con unos pocos de la generación actual de estudiantes en los que veremos por ejemplo en una alumna que viaja en un colectivo, el tipo de lenguaje que emplea para referirse a una profesora, muy diferente a como parece que fue en el pasado.
©José Luis García/Cinestel.com
Notas de la directora sobre la película, aquí.